Y ese fue Noé, que consiguió aniquilar a los diversos monstruos que habían invadido su nave espacial (el Club). A las 6 de la tarde, el Club se convirtió en una nave sideral. Los aliens habían invadido todas las salas, y estaban al acecho, en la oscuridad, para atacar a cualquier astronauta desprevenido. Varios fueron los atrevidos que entraron en estas circumstancias en la nave espacial. Sin embargo, sólo Noé consiguió eliminarlos a todos.
Después de juego, tuvimos la actividad de maquetismo. Esta vez nos sorprendió Paco con el reto de pintar desde diferentes perspectivas una caja. Juan fue el que se llevó el premio al mejor dibujo.
Después, tuvimos plática donde D. Juan Pedro nos habló del Domund, y contó diferentes anécdotas suyas en pasises del tercer mundo.
A las 8, entrenamiento de fútbol y básket. Se lo pasaron súper bien. Al final partido de fútbol y básket para poner en práctica toda la técnica aprendida.
Entre actividad y actividad, los chicos conocieron a la nueva mascota de Añisclo: la pogona. Todos quisieron acariciarlo y darle la bienvenida al Club.
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