HUGO. Ayer por la tarde hicimos un plan de los que se graban a fuego en la memoria. Jugamos a rugby. Un 4 para 4 en el campo de hierba de Siétamo. Primero de todo tuvimos que aprender algunas nociones básicas, como que el pase es hacia atrás, el modo de placar o que se defiende en línea y cosas del estilo. Pero como estábamos ocho fue relativamente sencillo y rápido. Y en cuanto pusimos el balón en juego la sed de victoria y el instinto de supervivencia entraron también al partido. Así pues tendríais que ver como Chema corría por la banda, las ganas de placar de Jesús, Diego y Alberto, las aperturas de Andrés, los pases de Josemari, los moratones de Pablo o las indicaciones de Hugo. Al final, como dicen en la cuna del rugby: Pain is inevitable. Suffering is optional. Y disfrutamos mucho, mucho, mucho.
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